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Desde que Mark Zuckerberg anunció el cambio de nombre de su compañía Facebook a Meta, y la creación de un nuevo espacio para que interactúen las personas e internet de manera más realista, la carrera por el metaverso se dio por iniciada, teniendo varias compañías enfocándose en el desarrollo de su propio espacio metaversal.
El metaverso es una idea creada por Neal Stephenson en su libro Snow Crash, y que, al día de hoy, ya forma parte de la nueva realidad de millones de personas, por lo menos en el ámbito informático.
De esta forma, otras compañías además de Meta han apostado por crear esta fusión de realidades que podrían cambiar el futuro de la humanidad. Entre ellas podemos contabilizar a Microsoft, Epic Games, SM Entertainment, Nvidia, Sony Music, Unity y hasta Niantic, desarrolladora de videojuegos como Pokémon Go.
El mundo cripto tampoco ha sido ajeno a este nuevo paso del internet, por lo que algunas firmas del mercado cripto también han decidido dar sus primeros pasos en el nuevo entorno digital. ¿pero como será esa primera entrada al metaverso?
Para resolver esa duda BitcoinNews envío a una de sus escritoras a vivir la experiencia de navegar en el metaverso de Decentraland.
De acuerdo con el sitio de noticias cripto, su enviada Neomi, fue la encargada para sumergirse en Decentraland, una plataforma de Realidad Virtual descentralizada en 3D, la cual está integrada por 90, 601 parcelas (digitales) de tierra.
Una vez que Neomi ingresó a Decentraland, quiso enfocarse en tener un perfil bajo con el objetivo de investigar más a fondo sin llamar demasiado la atención. Para ello decidió que su avatar fuera un tipo calvo con un típico traje negro y un par de gafas de sol negras. Tan bien salió el desarrollo de su versión digital, que a los pocos minutos de haber comenzado se encontró en su camino con otros 10 jugadores que se veían exactamente iguales.
Una de las primeras cosas que constató la reportera cripto, es que, en efecto, muchas cosas en el metaverso tienen un costo elevado, incluso los sombreros, razón por la cual seguramente sus hermanos de traje negro al igual que ella andaban sin uno, debido a su elevado precio.
Con la misión personal de lucir un poco menos similar a los otros jugadores de traje, la reportera decidió ir en busca de algunos activos que le permitieran mejorar el aspecto de su avatar.
En su viaje encontró una área en la que muchas personas se encontraban extrayendo meteoritos buscando gemas en su interior. De primera instancia, no era del todo comprensible la actividad a realizar, ya que simplemente los demás usuarios se quedaban inmóviles, dando la apariencia de que tuvieran algún tipo de problema de latencia o sencillamente se hubieran quedado sin conexión de internet.
No obstante, algunos minutos después de observar, la reportera se percató de que estaban minando activos. Algunos incluso se elevaron del suelo mientras se subían a sus respectivos meteoritos, los cuales cabe resaltar, los demás usuarios son incapaces de ver.
Esto permite que cada jugador tenga su propio meteorito en el qué trabajar, para poder explotar los recursos sin problema alguno, ya que de lo contrario, dicha área se convertiría en un genuino campo de batalla con jugadores golpeándose entre sí, solo por competir por los recursos.
De acuerdo con la reportera, la principal diferencia entre el metaverso basado en blockchain y un juego de rol en línea es sin lugar a dudas la propiedad. El metaverso no pertenece a una compañía como lo sería un juego en plataformas como Xbox o PlayStation, sino que es parte de una red descentralizada de jugadores.
Esto significa que los desarrolladores no cuentan con los derechos definitivos sobre lo que contiene su juego, lo que significa que todo aquello que logre obtener el usuario, en realidad le pertenece a través de la inmutabilidad de blockchain, es sin lugar a dudas un cambio de ritmo por demás interesante en un juego.
Esto provoca que los gamers se enfoquen más que en un título tradicional en subir de nivel. Esto, además, permite demostrar que el metaverso no es una utopía, ya que todo lo que pueda obtener un usuario es ganado por medio del esfuerzo.
Otro punto a favor del metaverso es que, al igual que un videojuego de mundo abierto, este entorno permite a los jugadores desplazarse por una serie de lugares de interés, para diversos gustos y en los que claro está, encontrará diversos retos al estilo de las tumbas de Tomb Raider, que puede tomar o no, pero que de hacerlo tendrá como recompensa un NFT.
Sin duda, el metaverso se está convirtiendo en un espacio virtual del agrado de muchas personas, en el cuál, a diferencia de un videojuego tradicional sí que puede hacer dinero real que pueda utilizar, canjear o vender con quien quiera.
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